
Monte Caseros, 20 septiembre del 2025. – La ciudad de Monte Caseros atesora en su historia un capítulo singular y casi inverosímil para la tradición cultural argentina: la celebración de una auténtica corrida de toros española. Este hecho, ocurrido el domingo 9 de abril de 1967, se mantiene en la memoria colectiva como un evento único, un experimento audaz que nunca se repitió.
El escenario fue el Estadio del Club Samuel W. Robinson, que por una tarde se transformó en una plaza de toros monumental. La cartelería de la época, que aún conservan algunos coleccionistas, anuncia el evento con gran pompa. La corrida fue organizada con motivo del 61º aniversario de la fundación de una entidad local (cuyo nombre específico se ha perdido en el recuerdo, abreviado en el afiche como «Entid.»), que buscaba ofrecer un espectáculo sin precedentes.
El encargado de lidiar los cuatro astados fue el torero español Juan Bravo, cuyo nombre resonó en el ruedo internacional. El programa también incluía la presentación de acróbatas, un elemento adicional para atraer al público y ofrecer un espectáculo variado.
Un hecho excepcional en el contexto argentino
La realización de este evento es considerada un caso excepcional por varias razones
Contexto Geográfico y Cultural: Argentina, si bien tiene una fuerte herencia española, no tiene una tradición taurina arraigada como sí ocurre en países como México, Colombia o Perú. Las corridas de toros están prohibidas en muchas provincias del país, y en otras simplemente nunca formaron parte del folclore local. La Fiesta Brava es ajena a las tradiciones gauchas y criollas, centradas en el rodeo y la doma, no en la lidia hasta la muerte del animal.

Prohibiciones Legales: Incluso en 1967, las normativas de protección animal y las costumbres locales hacían muy difícil la organización de un espectáculo de estas características. Este evento en Monte Caseros se aprovechó de un vacío legal o de un permiso especial para un acto único, que luego seguramente sirvió para que se legislara en su contra o simplemente no se repitió por falta de interés o por controversia generada.

Carácter Único: No existen registros de que antes o después se haya vuelto a realizar una corrida de toros al estilo español en la provincia de Corrientes o en la región, lo que consolida a la de 1967 como un experimento aislado, una curiosidad histórica realmente y se dio en el Club mas viejo de la provincia de Corrientes.
Un recuerdo que perdura
Hoy, a más de cinco décadas de distancia, la «Monumental Corrida de Toros» de Monte Caseros es recordada como una anécdota fascinante por las generaciones que la vivieron y como un dato curioso por los más jóvenes. Es un testimonio de una época donde se experimentaba con espectáculos de diversa índole para entretenimiento de la comunidad.
El afiche original, con su diseño característico de la época, se ha convertido en una pieza de colección que certifica que, al menos por una tarde, el espíritu de España cruzó el océano y se instaló, de forma efímera pero imborrable, en el corazón de Entre Ríos.
