La falta de un profesional local para validar licencias médicas obliga a los docentes a un engorroso proceso ante el Ministerio de Educación de Corrientes. Denuncian maltratos, reducción arbitraria de días de reposo y gastos de traslado, lo que afecta su salud y la educación de los alumnos. Los reclamos formales no han tenido respuesta.
Mocoretá, 23 septiembre de 2025. – Docentes de esta localidad llevan más de dos años reclamando por la designación de un médico auditor en el hospital local, luego de que el anterior profesional renunciara y no fuera reemplazado. La situación genera demoras, maltratos y trabas burocráticas al momento de gestionar licencias por enfermedad, afectando tanto a los educadores como a la dinámica escolar.
Mónica Luna, docente local, explicó en una entrevista a canal 2 AVC Monte Caseros que, ante la falta de un médico auditor en Mocoretá, deben enviar toda la documentación vía WhatsApp a Corrientes Capital. “Allí, los médicos que revisan los casos suelen reducir los días de licencia, cuestionan los diagnósticos y exigen estudios complejos que aquí no podemos realizar”, denunció.
Entre los principales inconvenientes, Luna destacó que, si un docente necesita cuatro días de reposo –número mínimo para gestionar un suplente–, desde Corrientes suelen autorizar solo tres, impidiendo la designación de un reemplazo. “El grado queda sin maestro, y los chicos deben repartirse entre otros cursos, generando un caos pedagógico y emocional”, señaló.
Además, en casos de licencias superiores a 10 días, las docentes deben viajar a la capital provincial para firmar el alta, asumiendo ellos mismos los gastos de traslado. “Hoy eso representa un costo muy alto, y más aún cuando estamos enfermas”, afirmó Luna.
La problemática también se replica en localidades como Esquina, según confirmaron desde el gremio docente, aunque no ocurre en Monte Caseros, ubicada a pocos kilómetros de Mocoretá.
Hasta el momento, las notas elevadas por vía jerárquica y los reclamos gremiales no han obtenido respuesta alguna por parte de las autoridades educativas y políticas de Corrientes. “Si no tenemos solución, vamos a marchar. Es nuestro derecho y ya pasó mucho tiempo sin que nos escuchen”, advirtió la docente.
La falta de un médico auditor no solo vulnera derechos laborales, sino que impacta directamente en la salud de los docentes y en el derecho a la educación de los niños y niñas de la zona.