Un informe revela que el 64% de los argentinos percibe un giro autoritario en el gobierno de Milei, mientras el 62% vé sus ataques al periodismo como un peligro para la libertad de prensa. Frente a la estigmatización de los medios, la sociedad reclama neutralidad y crítica: el 86% exige periodismo independiente. ¿Está en riesgo la democracia cuando el poder busca silenciar las voces incómodas?
28 de mayo 2025 – El informe de Zuban Córdoba de mayo de 2025 ofrece una radiografía detallada de la percepción ciudadana sobre la relación entre el gobierno de Javier Milei, la prensa y la libertad de expresión en Argentina. Los datos revelan tensiones significativas que no solo afectan al periodismo, sino también a la calidad de la democracia en el país. A continuación, se analizan los hallazgos clave y su implicancia para el sistema democrático.
La percepción de autoritarismo y su impacto en la libertad de prensa
El 64.2% de los encuestados considera que el gobierno de Milei es «cada vez más autoritario», mientras que el 62.8% ve sus críticas al periodismo como un «ataque a la libertad de prensa». Estas cifras reflejan una preocupación ciudadana sobre el deterioro de un pilar fundamental de la democracia: la prensa libre. Cuando un gobierno estigmatiza a los medios, se debilita su rol como contrapoder y se limita el derecho de la sociedad a acceder a información diversa y crítica.
El estilo comunicacional de Milei: ¿Fortalecimiento o debilitamiento de la prensa?
El 53.9% de los argentinos cree que el estilo agresivo de Milei (como insultar a periodistas o usar redes sociales para confrontar) debilita la relación con la prensa. Solo el 17.1% considera que la fortalece. Este comportamiento no solo polariza el debate público, sino que también normaliza la descalificación hacia quienes ejercen el periodismo, algo que el 66.7% de los encuestados califica como «grave».
La calidad de la información en riesgo
Más de la mitad (55.3%) opina que la forma en que Milei trata al periodismo empeora la calidad de la información. Esto es alarmante, ya que una democracia saludable depende de ciudadanos bien informados. Si los medios son intimidados o desacreditados sistemáticamente, se reduce su capacidad para investigar y cuestionar al poder.
La demanda de neutralidad periodística
Un dato destacable es que el 86.8% de los argentinos cree que el periodismo debe ser crítico pero neutral, evitando alinearse con ideologías oficialistas u opositoras. Esto refuerza la idea de que la sociedad valora la independencia de los medios como garantía de pluralismo. Sin embargo, la polarización actual dificulta este equilibrio, especialmente cuando figuras políticas buscan deslegitimar a quienes no comparten su línea.
Casos emblemáticos: Denuncias y percepción de los periodistas
Las denuncias judiciales de Milei contra periodistas como Carlos Pagni, Viviana Canosa y Ari Lijalad son consideradas graves para la democracia por el 56.9% de los encuestados. Además, la imagen negativa de ciertos comunicadores (como Viviana Canosa, con un 77.8% de opiniones desfavorables) muestra que la ciudadanía distingue entre el derecho a criticar y el uso de ataques personales desde el poder.
La osadía que falta
El informe subraya una paradoja: mientras el gobierno capitaliza la fragmentación opositora, su confrontación con la prensa genera rechazo mayoritario. La ciudadanía percibe que, en un contexto de «cobardía planificada» (como señala el texto), la falta de osadía para defender instituciones clave como la prensa libre pone en riesgo la democracia.
La libertad de prensa no es un privilegio de los periodistas, sino un derecho de la sociedad. Los datos de Zuban Córdoba son un llamado de atención: sin medios independientes y sin respeto al disenso, la democracia se vacía de contenido. Como bien remarca el informe, en la Argentina de hoy, los más osados no son quienes acumulan poder, sino quienes defienden las reglas del juego democrático frente a la arremetida autoritaria.
Fuente del Análisis Político basado en el informe «Domingo de Datos» de Zuban Córdoba, mayo de 2025.